Recientemente, las plataformas de videollamadas se convirtieron en una ventana de oportunidad que los ciberdelincuentes han aprovechado para invadir la privacidad de los usuarios o realizar estafas virtuales.
Estas plataformas representan una necesidad para el trabajo desde casa, por lo que no es factible eliminarlas de nuestra vida cotidiana. Sin embargo, existen acciones que podemos tomar para evitar riesgos de seguridad:
Descargar la plataforma de sitios confiables
Evitar descargar la plataforma desde correos electrónicos y verificar la veracidad del URL. Para asegurarse de realizar una descarga segura, se recomienda visitar la página oficial, ya que los atacantes implantan códigos maliciosos en los paquetes de instalación que provengan de sitios no confiables.
La importancia de los “waiting rooms” o salas de espera
Las salas de espera en reuniones virtuales son un factor importante para mantener la privacidad y confidencialidad de lo que se ahí se expone ya que el moderador tiene que dar permiso de acceso a los participantes. Esto ayuda a evitar el “zoom bombing”, la intrusión de hackers que buscan transmitir material malicioso, con mensajes que incitan al odio, contenido pornográfico, entre otros.
Contraseñas y links
Las contraseñas y links que ofrecen las plataformas de videollamadas, deben ser desechadas una vez que ya se utilizaron. Esto para evitar que algún hacker logre utilizar esta información una y otra vez para ingresar de manera remota a nuestros equipos, atender a alguna reunión virtual sin hacerse notar, etc.
Utilizar softwares institucionales
Se recomienda controlar o definir el software a utilizar por los usuarios invitados; por ejemplo, Gsuite de Google o Office365 de Microsoft, cuentan con mecanismos de videoconferencias. Estos tienen sus logs almacenados en un ambiente institucional y si se presentara algún incidente, esto nos permitiría analizar lo que sea que haya ocurrido.